sábado, 19 de noviembre de 2011

MONTE SARASÉ (2179 m.), CASI DESDE CASA

Hace días que me ronda por la cabeza hacer una travesía guapa. La pensaba hacer este año pero, por una cosa o por otra, la he ido posponiendo. Además no tenía claro que se pudiera hacer en el día, así que hoy me he decidido a hacer una parte para calcular tiempos y hacerla el año que viene Dios mediante. Consistiría en salir de casa, subir a la Caseta las brujas, de allí coger la loma del Cerro Saleras, subir hasta Sarasé, o Capaniacha o Loba o Cochata (de todas formas se llama) de 2179 m., bajar al cuello de Loba, subir desde allí a Sabocos de 2757 m., para bajar a los ibones, de allí a Hoz y de de Hoz, por el camino de Santiago, a casa otra vez. Hoy voy a intentar subir hasta Capaniacha desde el mismo pueblo. Al final, he hecho alguna trampa para poder llegar a casa a comer. He salido a las seis de la mañana, de noches oscuro y subo con el coche hasta la pista de Iguarra. Así me ahorraré una hora de bajada, aunque el desnivel negativo va a ser de casi 2000 m. Dejo el coche y vuelvo a bajar, andando, hasta donde empieza el camino de la Caseta las brujas. Vuelvo a subir con el frontal, salgo a la pista de Iguarra y cojo el desvío indicado a Fuente Chaimona. Antes de llegar, en otro cruce indicado, cojo el camino que sube de frente por la arista, indicado como punta Cochata. Aquí se me hace de día. El camino va por una cresta cubierta de pinos y erizones con una vista cojonuda hacia el sur. Todavía se ven las luces de Sabiñánigo, de Biescas y los coches que van por la carretera del valle. Paso por una punta, llamada punta Cuchiecho. Aquí la cresta toma dirección norte y, por medio de un espeso pinar de pino negro llegamos a la punta Puñero. Topónimo claro como un libro abierto, del latín Podium nigrum, "punta negra" debido al color de la vegetación. 2007 m. y cubierto de un espeso pinar. Este va a ser el futuro del Piri. Los árboles van a colonizar hasta los 2100 o 2150 m. de altitud debido a la disminución de la presión ganadera. El bosque, después de milenios de talas, incendios y pastoreo, vuelve a recuperar sus dominios prehistóricos. De Puñero se baja a un collado herboso, se vuelve a pasar otro bosquete de pino, y se inicia la subida de la pirámide cimera. Sopla mucho viento, hace un frío que pela y se ha nublado mucho. Tanto que está empezando a nevar. Llego a la cima. Me ha costado 3 horas justas desde la carretera de Cotefablo. Si continuara con la travesía que he pensado, me quedaría, aproximadamente, dos horas más hasta Sabocos, hora y media hasta los ibones, otra hora y media hasta Hoz y dos horas hasta Biescas. Se puede hacer. En verano y madrugando se puede hacer. Será un sobo pero estará bien la cosa.
Echo un bocado rápido, cuatro fotos y me voy para abajo. Hace mucho frío. Vuelvo hasta Puñero pero, en vez de coger el camino de subida, cojo otra cresta que sale dirección oeste. Sorteando enormes pinos negros, llego hasta la zona llamada la Cubilella (Del latín cubile, "cubil", "lugar donde se esconden los animales") Como si quisieran darle razón a la toponimia, salen tres sarrios del pinar y se quedan clavaos cuando me ven. El Yeti sale como un poseso detrás de ellos. Por supuesto, no tiene nada que hacer y los pierde en un momento ladera abajo.
En la Cubilella hay una caseta de falsa cúpula que a duras penas se mantiene en pie. Será una pena que desaparezca, siendo que son construcciones absolutamente arcaicas y muy raras en este valle...pero en el sitio donde está...hace falta ganas subir aquí a mover piedras...pero vamos, se podría intentar.
Allí mismo sale una antigua senda. Me cuesta encontrarla un rato. Al final me la encuentro ya iniciada y vuelvo sobre mis pasos para colocar un hito justo donde sale. Así ya no volveré a dar vueltas a lo tonto otra vez que venga por aquí. Esta senda, en fuerte bajada y casi perdida, nos baja a la pista que, desde Iguarra, lleva a la ladera norte del Valle de Lasieso. Ahora solo tengo que seguirla hacia abajo, pasar el refugio de Iguarra y llegar al coche en pocos minutos.
Todavía me da tiempo a echar una cerveza con mis mujeres antes de ir a comer y ponerme como un goliñón.
Para ser que daban malísimodelamuerte no ha hecho malo del todo. Claro que, si lo pienso, he sudao subiendo, me he jodido de frío en la cima y he vuelto a sudar ahora de bajada. Primavera, otoño e invierno en apenas seis horas.

Por cierto, hoy es día de reflexión y yo, donde mejor reflexiono es o en el monte o cagando. En ambos lugares he llegado a la misma conclusión:
Y, para eso:
Hala pues....

3 comentarios:

Bruno dijo...

El día que hagas toda la ruta ya puedes llevarte cena... yo con volverme desde Sabocos por la cresta hacia Peña Blanca y de ahí a Sta. Elena me conformaba. Suerte con tus proyectos.

J. M. N. dijo...

Hola Bruno:
Pues sí, será larga la ruta pero se me ha puesto entre ceja y ceja y otra cosa no tendré pero cabeza dura...anda que no.
La que tu propones ya la conozco. La hicimos parecida: Sta. Elena, Peña blanca, Peña roya, Sabocos y, sin pasar por Sarasé, bajar por el valle de Lasieso a coger el coche. No la recuerdo demasiado dura.
De todas formas, siempre queda la posibilidad de llamar a la jefa desde Hoz y que me venga a rescatar mientras la espero en el bar...
Gracias por leerme.

Bucardo dijo...

http://elretornodelbucardo.blogspot.com/