convocados por la Asociación Erata de Biescas a colocar el belén en la ermita de San Benito, me llena de odgullo y satisfacción comunicar que este año han sido ¡¡¡¡48!!!! a las que se han unido varias más en Espierre lo que hace más de 60 las que, de una manera u otra, han colaborado para que salga, el domingo 21 de diciembre, -Dies Natalis Solis Invicti- un día solsticial y festivo redondo.
Vamos por partes.
Ocho de la mañana en la plaza de Biescas. Al frío matinal propio de estas kalendas se opone el calor humano, los saludos efusivos y los besos de reencuentro mientras nos organizamos con los vehículos.
Partimos hacia Espierre donde llegamos al poco.
Una vez cogida altura, se hace patente el simpático fenómeno de la inversión térmica, de forma y manera que sobra toda la ropa que llevamos y que hace poco nos echábamos encima de forma compulsiva. De una forma u de otra (acaloraos o enfriaos quizir), llegamos a la ermita donde desplegamos todos nuestros encantos gastronómicos y/o enológicos mientras disfrutamos de un día primaveral en pleno diciembre.
Los más pequeños se encargan de montar el belén mientras los demás charramos, bebemos o
hacemos la fotosíntesis cada uno a su manera y cada uno rezándole al dios que más le conviene.
Da pereza, pero hay que marchar. Subimos al vértice de Erata, después a la punta d'o Puerto Yésero y bajamos por la senda normal hasta el collado de Yésero y poco después al coche.
Aun perdemos un rato visitando la ermita de San Chuan haciendo tiempo para que la intendencia nos prepare la comida.
Porque si, queridos y queridas amiguitas. Este año, como novedad, hemos preparado, con la colaboración de nuestras sufridas, abnegadas y santas esposas, una comida vikinga a base de ensalada para abrir boca y chulla, chorizo, longaniza y manjares varios (todos con colesterol por encima de 3000 ppm.).
Y en eso estamos hasta que los tragos, el sol que se pone y el frío que muerde nuestros entumecidos huesos, nos sugieren que ya es hora de marchar cada mochuelo a su olivo, u caxico según los casos, hasta el solsticio que viene.
Pues nada, que aunque tarde, feliz navidad para unos, feliz solsticio para otros y a esperar que el año que viene, como poco por estas fechas, hayamos mandado a donde se merecen a toda la banda de malnacidos que gobiernan, mangan y estafan en este país. Igual, en el próximo belén, hay muchas más cosas que celebrar.
Hala pues...que los dioses os sean propicios esta añada que entra.