martes, 29 de julio de 2014

BARRANCOS ARRIESAS Y AS FUEBAS.

El domingo 20 fue un día grande. Después de mucho anunciarlo y de más convencerla, Pirene, se decide, por fin, a desacartonar un neopreno que la última vez que se lo puso tenía hasta acné juvenil (ella, no el neopreno) Así que nos juntamos una buena chupipandi formada por Silvia y J.C, Pirene, su amiga y Josu y Pol y yo. Ahora lo suyo es decidir a dónde vamos para el magno evento.

Hay dos otres barrancos en la cabecera del Sorrosal, allá por los altos puertos de Linás de Broto, que nos hacen tilín hace días. Silvia y J.C ya bajaron uno recientemente y vinieron con buenas noticias en cuanto a su belleza y demás atractivos. Además, hay una piedra misteriosa que me gustaría mirar y localizar... venga, pues pallí que vamos.
Ocho y media en el bar de siempre. Después de las presentaciones y los cafeses que nos pide el cuerpo, cogemos carretera y en un tris estamos aparcando en el puente del Sorrosal, metros después de pasar la población de Linás.
Hace frío, mecaguenlaputa... vaya mierda de verano ¡coño!
Nos cambiamos, repartimos el material y subimos que casi apetece andar y todo para quitarte el frío...
El camino, ya conocido de otras incursiones y excursiones por este valle, sube paralelo al río sin demasiada pendiente y entre un variado, tupido y hoy lustroso y brillante bosque mixto. Cuando nos damos cuenta estamos ya en el puente de la Mercera, donde comienza uno de los descensos. Sin embargo, nosotros continuamos para salir a una pista donde, en frente, vemos el desarrollo del primer descenso que vamos a realizar, el barranco d'as Arriesas. Por evitarnos la cabecera y recortar un poco el descenso, nos metemos en una curva con un hito donde parte un camino, aparentemente muy fácil de seguir..... hasta que andamos 100 metros. Misteriosamente, lo que era un camino muy bien trazado, se ha convertido en una selva impenetrable de buxos, arizones y ortigas arborescentes que hacen las delicias de nuestras piernas y brazos.... Improperios, mentadas a los ancestros de los guías... al final, llegamos a no sabemos exactamente dónde del barranco en cuestión.
Echamos un bocado (afortunadamente la conversación con vino todo lo apacigua) e iniciamos el descenso.
Largo rato entre rampas hasta llegar a una cascada francamente maja. El equipamiento, como cabía esperar, no es todo lo bueno que debería si esto fuera un barranco frecuentado y algunos destrepes se las traen... Aún así, se avanza rápido. Tanto que, cuando nos damos cuenta, estamos cruzando la pista y dos o tres rápeles y una rampa después estamos ya en la desembocadura.
Pues no ha estado mal, pero vamos... tampoco es para tirar cohetes...
Pirene y Susana terminan aquí su jornada barranquista. Se bajan a las furgos y nos esperarán allí charrando y echando cafeses o lo que tengan a bien hacer mientras nosotros nos vamos al de As Fuebas.
En 10 minutos escasos nos plantamos en la cabecera. Hacer no hemos hecho, pero tengo un hambre... Bajamos al río, justo debajo del puente y se hecha a llover... pero a llover con ganas de forma que nos comemos lo que llevamos como indigentes, debajo un puente y mojándonos.
Allí mismo ya tenemos un salto muy majo. Parece que este barranquillo promete un poco más que el otro y así es. Los dos o tres primero rápeles la verdad que son bonitos y el minipasillo estrecho vigilado por un señor tejo varias veces centenario también es francamente chulo. Lo malo es que eso es todo... Se acabó el barranquillo en cuestión. Bastante menos de una hora nos hubiera o hubiese costado descender si no fuera porque, una de las razones de la visita a este paraje, es la existencia de una piedra y una fuente llamadas respectivamente Piedra y Fuente de la Pata del diablo. ¿Y qué tiene que ver esto con el barranquismo?  Pues nada, pero a los sitios hay que ir con ojos abiertos y ganas de aprender que los abuelos cuentan historias muy majas y de un alto valor antropológico, cultural y recreativo. Y si no, echarle un ojo a éste vídeo que hemos encontrado por esto del internete... que ahora si que veo que hay de todo. (el otro día encontré hasta una chica enseñando las tetas, con que no te digo más...) Estooooo... ¡A sí!, ¡El vídeo!.... Este es...
Se que lo estaréis pensando.... Los turistas, para el indígena autóctono, tenemos la misma
consideración que los ladrones y los maquis... Y sí, bebimos en la fuente, aún a riesgo de nuestra salud, así que me vais a aguantar varias décadas más...
Hala pues...

1 comentario:

Pirene dijo...

moooolan las foticos!!!

Y el desacartone no estuvo mal, a ver si hacemos otro más majo y termino de centrarme.

Salud!