u otras. Únicamente para llevar la contabilidad y para que, cuando se me caiga la baba y no pueda salir al monte, lo recuerde con nostalgia y mala leche.
Además, al ser una nueva concentración de blogueros, está perfectamente descrita y detallada.
Así que aquí tenéis la descripción de Silvia, aquí la de David y aquí la de Pirene. Aparte de los susodichos y sus parejas, nos acompañan Pol, Ana y Javier... un celemín de peña, vamos.
Pues eso, que buen día por un recorrido ya conocido y pateado donde la climatología nos sorprendió con un compendio de todas las estaciones del año en apenas cinco horas de recorrido.
Que sí, que merece la pena realizarlo.
Hala pues...