Bueno, pues hoy, como traca fin de fiestas, nos hemos ido a bajar el barranco de Fajalata que lo tenemos en la puerta casa y no lo habíamos bajado nunca. Bueno, estar, estar, está en la puerta casa pero son dos horas largas de andar y, aunque ha salido publicado en varias guías como Barranco Fajalata, el topónimo correcto es Canal d'as Palomeras. La aproximación es magnífica, con unos paisajes soberbios pero si pones en una balanza lo que te cuesta en tiempo y lo que te aporta el barranco al final es de esos para ir una vez y no volver. Si eres de los machacabajabarrancos que buscas peligro y adrenalina, éste no es tu barranco. Si lo que buscas es soledad, anclajes viejos y movedizos un poco de aventura y bonitos paisajes, entonces sí, ven a darte una vuelta por aquí.
Dejamos un coche en el refugio de arriba del valle de Lasieso y con el otro bajamos valle abajo para subir al castillo de Sta. Elena. Hay que seguir el camino de Fajalata durante dos horas largas hasta el conocido como "Lomo d'os vascos". Allí veremos como el camino enfila de frente la ladera dirección norte en dirección al pico Fajalata y Peña Blanca. Aquí hay que dejar la senda y buscándote la vida entre arizones, bajar al cauce del barranco que, hoy, baja francamente menguao. Cuando estamos llegando al cauce nos sorprenden unos gritos. Prestamos atención ¿será posible que haya alguien bajando este barranco? Luego nos damos cuenta que son en la ladera de enfrente. Deben ser seteros o qué sé yo pero gritan como si los estuvieran capando...hace falta ser gilipollas.
Llegamos al cauce, por el que circula un hilo de agua y empezamos a bajar. La ladera sur de la sierra de Tendeñera, donde estamos, está formada por una serie de estratos de caliza que, en el plegamiento alpino, se verticalizaron más o menos. El agua ha aprovechado una zona de fractura entre el flanco de un gigantesco anticlinal a la izquierda y un chevron a la derecha para circular y ha labrado un profundo surco por el que vamos a descender. Claro que no es todo caliza, hay también estratos de areniscas calcáreas, mucho más blandos, que hacen que no se llegue a encajonar más que los últimos metros de su desarrollo. Empezamos a destrepar numerosos escalones. Siempre por terreno abierto, pero muy inclinado, bajamos y bajamos sorteando pozas plagadas de tritones hasta donde aparecen las calizas. Aquí sí que se ha labrado una garganta guapa. El agua culebrea formando un tubo estrecho y muy pulido. Es la parte más maja del barranco. Hay varios rápeles, sobre anclajes en general sólidos pero muy mal instalados y cuando te quieres dar cuenta sacabó. ¿¿¿¿Ya??? No puéser... Vamos a ver, acceso : 2h largas, descenso del barranco 1h:30 de las cuales lo realmente majo y deportivo no llega a 30 min. Pues sí, justo en frente circula el agua del barranco de Lasieso. Diez minutos por senda y nos plantamos en el coche de recepción.
Hombre, para pasar el día es majo, te das una vuelta por donde Cristo perdió as alpargatas pero como actividad barranquista no...
Pues eso, que aquí estoy con el síndrome postvacacional y quitándome punchas de as garras.
Hala pues...
3 comentarios:
Otro más que tendremos que bajar si queremos coleccionar jabalinadas!
Saludos.
J.C.
Mira, siempre me había preguntado si se podría bajar por allí y me había respondido que no. Yo desde luego no puedo ni subir ya, pero gracias por la excursión.
Hola JC.
Este jabalinero no es. No te tienes que pegar con barzas y artos pero laaaaargo de aproximación sí. Igual gana algo con agua pero tampoco esperes gran cosa aunque...como dice aquél...en peores plazas hemos toreao ¡Maeztro!
José Ángel; hay gente en Biescas que aseguran que por allí han bajado tirando de un jabalí muerto. Yo no lo tenía muy claro pero ahora ya te digo que no. Hace falta material específico para llegar abajo con todos los huesos en su sitio.
Gracias por pasarte por aquí.
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