lunes, 8 de febrero de 2010

CAP DE SETMANA A CATALUNYA NEN!!!


Com en el Pirineu el temps no acaba d'aconseguir-ho hem decidit anar a Monserrat a fer vies ferrades....Huy, perdón, es que, como tengo poca personalidad, enseguida se me pega el acento y la forma de parlar dels altres
Pues eso, que como el tiempo sigue siendo malo por aquí nos hemos ido a Monserrat a hacer vías ferratas. Yo no había estado nunca pero Oscar sí. Asi que, con guía profesional, finde chachi se presenta.
Salimos de casa a las seis y media de la mañana y llegamos a Huesca. Al final, vamos Oscar, Erika, Pol y yo. De tirada hasta el Bruc, al lado de las peñas de Monserrat. Hacemos un almuerzo-comida-merienda y cogemos la carretera que, rodeando la montaña por el este, nos lleva hasta el monasterio de Sta. Cecilia. Primera sorpresa. Al lado del párking vemos una iglesia lombarda preciosa. No solo la iglesia, de planta basilical y muy bien conservada... adosados a ella, subsisten todavía edificios de un monasterio. Hasta el claustro está en pie... Aquí dejamos el coche y cogemos una senda que se dirige decididamente, hacia la face nord de la montaña. En ella se instaló, en 1993, la Teresina, primera ferrata made in Spain. Se sube por una canal, trepando entre bloques, (llamada la canal del mejillón porque, en tiempos, hubo un restaurante arriba y tiraban las sobras de la comida por allí) hasta el inici de la ferrada. Enseguida nos damos cuenta que estas no tienen nada que ver con las que conocemos. El equipamiento es....vamos a decir diferente. Sirgas en buen (pocas), regular (bastantes) y mal (muchas) estado, alambres, cuerdas fijas en las que da grima colgarte, pocas grapas y muchas minigrapas en las que lo más fácil es dejarte los dedos si te caes.... La vía es larga de collons. Primero sube a una primera aguja, la de Sta Cecilia, y después de un rápel por un canalizo se coge un camino muy aéreo que te lleva a la base del mallo de San Jeroni donde, para subir, hay que coger una chimenea estrecha como el chichi de la Nancy y muy mal equipada. Pasos en oposición, resoplidos, chemecadas... fins arribar al mirador de Sant Jeroni, punto culminante y cota más alta del macizo de Monserrat. Cerca de cuatro horas. Arriba un montón de guiris que han subido por el camino de las escaleretas desde la abadía, nos miran sorprendidos. La vista desde arriba acojonante. Todo el macizo, la comarca del Bagès, el Piri nevao, Barcelona y el Mediterráneo se ven desde allí. Fotos, un bocao y abundantes tragos de vino e iniciamos el descenso por el sendero que, en una hora larga y después de bajar varios cientos de escalones, nos lleva a la Abadía de Monserrat. Tinglado curioso el que hay montao allí. Una basílica neogótica enorme en el que hay ¡una virgen negra, nen! ¡Y quieren que la adoremos! (Para coger la gracia, si es que la tiene, pincha en este enlace: http://www.youtube.com/watch?v=Vo865Q_7M7g ) Visita turística a parte de las instalaciones y por la carretera a coger el coche que se nos ha quedao a tomar pol culo de aquí. Cuando llegamos otra vez a Sta. Cecilia ya anochece. Desde las 11 hasta las 6 de la tarde...7 horas. Bien, esto empieza bien.
De allí nos bajamos a Manresa a sopar i dormir després de fer una tornada turística per la ciutat.
El domingo sale un día magnífico. Vamos otra vez hacia las montañas, como Heidi. Se nos ha unido Carles, un colega de Óscar, mientras que Erika decide que ya a tenido bastante y se queda de intendencia en el coche. Hoy vamos a hacer una canal llamada el Joc de l'Oca que consiste, básicamente, en hacer barranquismo al revés. Si en cualquier barranco, nuestra amiga la gravedad nos ayuda a superar los obstáculos, en este, se empieza por el final y todos los resaltes están equipados con cadenas o cuerdas fijas para subir a pulso hasta arriba. ¡La mare de Déu que cansament o cansera o sobo o quebranto! Tropezientosmil resaltes a superar todos a pulso y sin posibilidad de asegurarte en ningún lao. No es una ferrata ya que no hay línea de vida ni apenas clavijas. Es, solo eso, una canal con cadenas por las que hay que subir. Los primeros resaltes se suben bien, en los de medio chemecamos (o gemimos) como meretrices y en los últimos estamos ya hasta los güebos. Al final se acaba (dos horas) y llegas a mitad de ninguna parte. Caminos cerraos y sin señalizar te llevan otra vez al aparcamiento. Oscar y Carles bajan al coche y Pol y yo, como todavía no hemos hecho bastante el capullo, nos metemos en un barranco llamado Las tres en ralla (perdon, Les tres en ratlla) que baja al este del que hemos subido y paralelo a él. Seco como el ojo de un tuerto, es un barranco típico de conglomerado. Muchos pasos en oposición, algun tramo muy estrecho y tres impresionantes rápeles finales de unos 30 m. per capita te bajan otra vez cerca del aparcamiento.
Comida en el capó del coche, abundantes tragazos de vino (bebe mozé que hoy te lo has ganao) y a casica per l'autovía.
Oye, que finde más chachipiruli. Estoy cansao como un perro, me hacen mal los brazos como si hubiera estao entrando hierba todo el día pero qué bien nos lo hemos pasao...habrá que volver algún día más que encara hi ha ferrades que no hem fet.
Hala pues...

2 comentarios:

POL dijo...

No sabía que parlabas tanbé lo catalán. Un gran finde.
Salú

J. M. N. dijo...

Hay muchas cosas que no sabes de mí, pese a que estás más tiempo conmigo que con tu esposa...ya las irás descubriendo...corazón.